La adolescencia es un período del desarrollo del ser humano en el que se suceden
cambios a gran velocidad. Los cambios físicos tienen como
finalidad la maduración sexual que garantiza la capacidad reproductiva.
Esos cambios físicos están acompañados de cambios en la
manera de pensar y de relacionarse con los demás. Los cambios psicológicos en
la adolescencia son una parte normal del desarrollo. Pero que sean normales no
quiere decir que sean fáciles para el adolescente o para los padres.
Es muy valioso tener bien claro los cambios que se presentan
durante esta etapa de la vida, ya que como individuos el apoyo y orientación
adecuada nos ayudara a transitar los cambios de forma natural sin que nos
deprimamos o frustremos.
A continuación estaremos destacando los puntos as
resaltantes de esta importante etapa de la vida que llamamos Adolescencia.
¿QUE ES LA ADOLESCENCIA?
Es el Periodo de la vida comprendido entre las edades
infantil y adulta; en él se incluye, generalmente, la pubertad, que constituye
su primera fase. Durante esta etapa los
jóvenes definen su posición ante la familia, sus compañeros y la sociedad donde
viven.
La adolescencia se inicia a distinta edad según el
sexo (hacia los 13 años en los hombres, y hacia los 11 en las mujeres y termina
en la adultez cuando el cuerpo esta completamente desarrollado.
Durante esta etapa los adolescentes comienzan a tomar
riesgos y a experimentar en la vida ya que están pasando de un mundo centrado
en la familia a un mundo centrado en la comunidad dentro del cual van a definir
su propia identidad
CAMBIOS FÍSICOS Y PSICOLÓGICOS DEL
ADOLESCENTE
Cambios físicos:
Durante este periodo de la vida surgen, en ambos
sexos, unas modificaciones muy evidentes, que deben atribuirse a la madurez y,
por lo tanto, al funcionamiento de los órganos sexuales.
En el sexo femenino la madurez de la célula del huevo
comporta la aparición del ciclo menstrual, y con ello se afirman los caracteres
sexuales secundarios (desarrollo de la glándula mamaria y de los genitales
externos, aparición del vello pubiano y axilar).
En el sexo masculino la madurez sexual se alcanza con la espermatogénesis (esto es, paso de la célula sexual desde su primitivo estadio de espermatogonio al de espermatozoide), que motiva unas mutaciones somáticas no menos evidentes (vello en el pubis y en las axilas y más tarde en el rostro, engrosamiento y desplazamiento de los genitales).
En el sexo masculino la madurez sexual se alcanza con la espermatogénesis (esto es, paso de la célula sexual desde su primitivo estadio de espermatogonio al de espermatozoide), que motiva unas mutaciones somáticas no menos evidentes (vello en el pubis y en las axilas y más tarde en el rostro, engrosamiento y desplazamiento de los genitales).
El crecimiento experimenta, durante la pubertad una
mayor lentitud, a la que se atribuye la diferencia de estatura que normalmente
se registra entre los dos sexos: en efecto, la maduración sexual se verifica
más precozmente en la mujer que en el varón.
Por otra parte, durante la fase de la pubertad, el
crecimiento se efectúa casi siempre en anchura (a nivel de la pelvis en la
mujer y de los hombros en el varón); como consecuencia, al combinarse el
desarrollo muscular con el óseo, el adolescente adquiere un aspecto exterior
completamente distinto de la niñez.
Desde el punto de vista médico, durante este periodo,
el adolescente necesita una aportación nutritiva proporcionada a las mayores
necesidades de su organismo en crecimiento, así como un equilibrio
indispensable para corregir su genérica condición de inestabilidad.
Contribuirán a hacerle alcanzar este equilibrio unos adecuados periodos de
reposo, y, en los límites de lo posible, un ambiente familiar capaz de resolver
serenamente todos los problemas (especialmente los que atañen al carácter) que
se le puedan plantear.
Una vez superada la pubertad propiamente dicha, se
registra una progresiva evolución hacia la edad adulta: aumento lento, pero
constante, de la estatura: desarrollo de las masas musculares; aumento de la
resistencia fisiológica, etc.
Cambios
psicológicos:
El crecimiento durante la pubertad precede e influye en la
evolución del comportamiento del adolescente. En efecto, los trastornos de
carácter, aunque constituyen una parte integrante de la crisis de la
adolescencia, son a veces tan intensos que inducen a los padres a consultar al
médico o al psicólogo.
Lo que más destaca en el adolescente en crisis es su extremada inestabilidad, por la que continuamente oscila entre sentimientos antagónicos: con rapidez desconcertante pasa de la oposición más abierta a la pasividad; de unos sentimientos de inferioridad y baja autoestima a los sentimientos de superioridad: de la timidez a la insolencia; de la generosidad a la villanía; de las tendencias místicas a otras hacia una existencia disoluta; de la alegría al disgusto por la vida; del terror a la muerte a las tentativas de suicidio, y ello por motivos a menudo insignificantes. Esta crisis, llamada de excentricidad juvenil, aunque adquiere características diferentes en la jovencita y en el muchacho, posee en ambos el mismo significado: se encuentra sometido a discusión el propio yo, partiendo de la misma metamorfosis física que conduce al descubrimiento de nuevas emociones y a la sexualidad adulta.
Lo que más destaca en el adolescente en crisis es su extremada inestabilidad, por la que continuamente oscila entre sentimientos antagónicos: con rapidez desconcertante pasa de la oposición más abierta a la pasividad; de unos sentimientos de inferioridad y baja autoestima a los sentimientos de superioridad: de la timidez a la insolencia; de la generosidad a la villanía; de las tendencias místicas a otras hacia una existencia disoluta; de la alegría al disgusto por la vida; del terror a la muerte a las tentativas de suicidio, y ello por motivos a menudo insignificantes. Esta crisis, llamada de excentricidad juvenil, aunque adquiere características diferentes en la jovencita y en el muchacho, posee en ambos el mismo significado: se encuentra sometido a discusión el propio yo, partiendo de la misma metamorfosis física que conduce al descubrimiento de nuevas emociones y a la sexualidad adulta.
Las hormonas tienen un papel fundamental en este aspecto.
Están ahí, van a quedarse y a actuar. El adolescente tiene sentimientos confusos sobre el sexo.
La aparición del deseo sexual debe canalizarse. Los
adolescentes necesitan información sobre enfermedades de transmisión sexual y
la reproducción. Hacer del tema un tabú no les protege ni les ayuda.
¿QUE SON LOS CROMOSOMAS?
Los cromosomas son estructuras microscópicas que se
encuentran presentes en todas las células del organismo. Contienen los genes
que determinan todos los rasgos genéticos, como el color de los ojos y del
cabello, y que controlan el crecimiento y el desarrollo de cada componente de
nuestro sistema físico y bioquímico.
Los seres humanos tienen 23 pares de cromosomas, es decir 46
cromosomas en total. Al formarse el embrión se hereda un cromosoma
materno y uno paterno de cada par. El par número 23 está formado por los
cromosomas que determinan el sexo. Las mujeres tienen dos cromosomas X y los
hombres un cromosoma X y un cromosoma Y.
COMO SE IDENTIFICA SEXUALMENTE EL HOMBRE
Y LA MUJER
La identidad sexual esta relacionada con los patrones
sexuales que cada persona representa en la sociedad. La identidad sexual esta
definida en el individuo desde el nacimiento y es producto de la combinación de
factores biológicos (el aspecto externo
e interno de su órganos genitales, el predominio de hormonas masculinas y
femeninas y la función de su sistema reproductor), y factores psicológicos (la
influencia que recibe de sus padres, de la sociedad y características
psicológicas del mismo individuo).
PERIODOS FUNDAMENTALES EN LA EVOLUCION
DEL SER HUMANO
El ser humano pasa por tres periodos fundamentales en
su evolución personal:
La Niñez:
En esta etapa experimentamos cambios físicos y
psicológicos importantes, adquirimos hábitos, actitudes y sentimientos que nos
preparan para la adolescencia
La Adolescencia:
Es el periodo intermedio entre la niñez y la edad
adulta, el proceso de desarrollo se manifiesta en los niveles fisiológicos,
psicológicos y sociales. Los adolescentes cambian tanto física como mentalmente. Esta es la época de los
ideales y de las utopías que hacen variar el comportamiento ante familiares y
personas conocidas.
La adultez:
Durante esta etapa el individuo posee la madurez y la
responsabilidad para enfrentarse a los patrones familiares, laborales y
sociales.
DISTINTAS FASES DE LA ADOLESCENCIA
Existen diferentes criterios para establecer en qué momento
termina una etapa de la adolescencia y en qué momento empieza otra. De hecho, no hay
ningún criterio enteramente objetivo y definitivo para establecer esas
fronteras temporales, ni lo puede haber; todo depende de en qué
parámetros nos fijemos.
Sin embargo, eso no significa que no exista un cierto consenso
acerca de cuáles son estas fases. A continuación puedes verlas explicadas y
descritas.
1. Pre-adolescencia
La pre-adolescencia va de los 8 a los 11 años, y consiste en la
etapa en la que se produce la transición entre la infancia y la adolescencia.
Por eso, existe cierta ambigüedad acerca de si esta fase pertenece a la
infancia a la adolescencia. Lo que sí es seguro es que en la mayoría de los
casos, la pre-adolescencia coincide con el inicio de la pubertad.
Los cambios físicos que se dan en esta etapa son notables y
afectan a muchas partes del cuerpo. Por ejemplo, es en este punto cuando los
huesos empiezan a crecer de forma rápida y de manera desigual,
lo cual puede hacer que cueste un poco más coordinar los movimientos (aparece
una sensación de torpeza) y que aparezcan ligeras molestias
en algunas articulaciones.
En esta etapa de la adolescencia se producen grandes
progresos en la capacidad para pensar en términos abstractos.
Es por eso que se es más capaz de reflexionar sobre situaciones hipotéticas o
sobre operaciones lógicas y matemáticas. Sin embargo, normalmente al abandonar
esta fase no se tiene un total dominio en estos ámbitos.
Del mismo modo, se tiende a tratar de encajar en los roles
de género, para no salirse de los estereotipos relacionados con la apariencia y los
comportamientos diferenciados del hombre y de la mujer.
2. Adolescencia temprana
La adolescencia temprana ocurre entre los 11 y los
15 años, y en ella se dan los principales cambios súbitos de
tipo hormonal, hasta el punto en el que al abandonar esta fase el cuerpo es muy
distinto al que se tenía durante la pre-adolescencia.
La adolescencia temprana es la fase en la que se
producen los mayores cambios en la voz. Del mismo modo, se
desarrolla la musculatura y los órganos sexuales hasta tener una
apariencia mucho más adulta. El hecho de disponer de unos
músculos más grandes hay que se necesite comer más y dormir durante mayor
tiempo.
Del mismo modo, en muchos casos empieza
a manifestarse el acné por la cara, debido a un aumento de
segregación de sustancia grasa en la piel.
En la adolescencia temprana se llega a conquistar la total
capacidad para pensar en términos abstractos, aunque esto solo se produce si se
ha practicado esta habilidad y se ha gozado de una buena educación.
Del mismo modo, el gregarismo ocupa pasa a tener un papel muy importante
tanto a la hora de relacionarse con los demás y de buscar referentes fuera de
la familia, como a la hora de construir la propia autoestima y auto-concepto.
En esta época se experimenta con diferentes elementos que pueden conformar una
identidad, como la estética relacionada a tribus urbanas.
Del mismo modo, tiende a valorarse mucho la opinión que los
demás tienen de uno mismo. Se considera que la imagen y la estética es un
componente primordial de la propia identidad y bienestar.
3. Adolescencia tardía
Esta es la tercera y última de las etapas de la
adolescencia, y ocurre aproximadamente entre los 15 y los 19 años, según la Organización Mundial de
la Salud.
Las personas que se encuentran en esta fase suelen
mostrar más homogeneidad en sus características que las que se
encuentran en la adolescencia temprana, porque la gran mayoría ya ha pasado por
los cambios más bruscos. Esto ha llevado a algunos investigadores a concluir
que esta fase no se diferencia sustancialmente de la adultez, y que tan solo es
un constructo social existente en ciertas culturas y no en otras. Sin embargo,
hay que tener en cuenta que el impacto psicológico de los constructos sociales
es totalmente real y, por consiguiente, puede influir en el proceso de
maduración, como veremos.
Durante la adolescencia tardía se acostumbra a alcanzar la
altura máxima marcada por el propio crecimiento, y la
complexión del cuerpo pasa a ser totalmente adulta. Por otro
lado, las aparentes desproporciones que podían darse en la primera fase de la
adolescencia desaparecen dando un aspecto mucho más cohesionado a las
dimensiones de brazos, piernas, etc. Por otro lado, el cuerpo también gana masa
muscular y la propensión a acumular grasas se mantiene más o menos estable o
incluso se reduce un poco, si bien la adopción de mejores hábitos alimenticios
también cumple un papel en esto.
En esta etapa termina de desarrollarse la conciencia social
y se empieza a dedicar mucho tiempo a pensar en situaciones y procesos que no
están limitados a lo que se puede ver, oír y tocar en el entorno inmediato. Es
una renuncia al egocentrismo típico de las etapas anteriores, si bien no
desaparece del todo.
Los planes a largo plazo pasan a ocupar un papel mucho más
importante que antes, y la imagen que se da, aunque sigue siendo relevante,
empieza a dejar de ser uno de los principales pilares de la propia identidad.
Se abandona buena parte del egocentrismo que definía la infancia y el resto de
etapas de la adolescencia, lo cual hace más probable que estos jóvenes se
interesen por la política y los procesos sociales en general, pues sus
objetivos pasan a estar más relacionados con aquello que está más allá de sus
círculos sociales.
DEFINICION DE PUBERTAD
Originado en el vocablo latino pubertas, pubertad es
un concepto que describe a la etapa inicial de la adolescencia, un periodo en
el cual se producen transformaciones que marcan el final de la niñez y el
inicio del desarrollo adulto.
Se presenta en los varones alrededor de los 12 anos y
en las hembras entre los 10 y 11 anos.
CAMBIOS MORFOLOGICOS
Cambios morfológicos se refiere a los cambios en la
estructura del organismo, durante la adolescencia se presencia cambios morfológicos
importantes, aparecen las primeras menstruaciones en las niñas y en los varones
las primeras emisiones espermáticas, en ambos aparece el vello pubiano, también
diferentes reacciones ante el sexo opuesto. El aparato reproductor se
desarrolla hasta alcanzar la capacidad biológica natural para ejercer la función sexual. Estos cambios
no se dan al mismo tiempo en todos los seres humanos.
¿HAS SENTIDO ANSIEDAD? CUANDO? QUIEN TE
HA AYUDADO?
Hasta los momentos no he sentido ningún tipo de
ansiedad, vivo la vida con alegría y entusiasmo, experimentando y aprendiendo
junto a mi familia y amigos cosas nuevas
y sanas todos los días, siempre estoy consultando con mi familia en caso de
haber dudas sobre mi cuerpo, sentimientos, emociones o sensaciones y de esa manera
no tengo necesidad de deprimirme porque obtengo información al instante.
¿QUE ES LA AUTOESTIMA?
La autoestima es el valor que el individuo atribuye a
su persona y a sus capacidades. Es una forma de pensar positivamente, una
motivación para experimentar diferentes perspectivas de la vida, de enfrentar
retos, de sentir y actuar qué implica que nosotros nos aceptemos, respetemos,
confiemos y creamos en nosotros mismos.
La autoestima presenta dos dimensiones, uno de ellas
es el concepto propio, el cual es la idea que tenemos acerca de quienes somos o
cual va a ser nuestra identidad, y la fabricamos mediante la conducta que
desarrollamos. Y por otro lado tenemos el amor propio, es el significado más
directo de la palabra auto (sí mismo/a) estima (amor, aprecio). Quererse a sí
mismo, ni es egoísmo, ni es enfermizo; es un sentimiento fundamental.
La valoración de uno mismo se basa en todos los
pensamientos, sentimientos, sensaciones y experiencias por las que pasamos y
hemos ido recogiendo durante nuestra vida. Ésta puede variar a través de las
diferentes áreas de la experiencia de acuerdo con el sexo, la edad y otras
condiciones.
¿QUE ES LA ALTA AUTOESTIMA Y LA BAJA
AUTOESTIMA?
Las personas que tienen una alta autoestima se sienten aptos
para la vida: tienen un sentimiento de capacidad y un sentimiento de valía
personal. Son personas con total
seguridad sobre ellos mismos, son capaces de tener intimidad en sus
relaciones, no esconden sus sentimientos sino que si son verdaderos los
demuestran, tienen capacidad para reconocer sus propios logros en la vida,
tienen la habilidad de perdonar los demás y también de saber admitir sus
errores, no temen los cambios en sus vidas, todo lo contrario, los ven
bienvenidos.
Las personas con la autoestima baja tienden a
pensar de forma negativa en general -de hecho, ven la realidad distorsionada-,
y tienen miedo de cometer errores, están insatisfechas con su vida y se sienten
frustradas. También están siempre a la defensiva y temen ser abandonados o
heridos por los demás. Adoptan una posición de víctima y se sienten inferiores
a los demás.
Importante destacar que la autoestima no se hereda ni
se compra, se aprende.