Aprendamos de los escritos de Nichiren Daishonin:
La enseñanza para lograr la Victoria
Disertaciones de estudio del presidente Ikeda
El daimoku del Sutra del Loto
Antecedentes
Este escrito es una carta que data de enero de 1266. Aunque no se sabe quién es el destinatario, del contenido del texto se desprende que fue una mujer que, con anterioridad, había practicado las enseñanzas de la Tierra Pura (Nembutsu) y que se había convertido al budismo del Daishonin recientemente.
El daimoku del <Sutra del Loto>
Los que siguen entonando Nam miojo rengue kio construyen vidas felices, honorables y colmadas de alegría
Texto del Gosho
Nam miojo rengue kio
Pregunta: ¿Es posible, sin entender el significado del Sutra del loto, con solo entonar los cinco o siete ideogramas de Nam miojo rengue kio una vez por día, una vez por mes, o sólo una vez por año, o una vez en una década o en toda una existencia, evitar ser arrastrados a cometer malas acciones graves o triviales, salvarse de caer en los cuatro malos caminos y, en cambio, llegar con el tiempo al estado del que no se retrocede?
Respuesta: Sí, es posible.
Pregunta: ¿Cuán grandes son los beneficios contenidos en los cinco ideogramas de Miojo rengue kio?
Respuesta: El gran océano contiene en su totalidad los numerosos ríos que desembocan en él; la gran tierra contiene todos los seres animados e inanimados; la gema que concede los deseos es capaz de prodigar un sinfín de tesoros, y el rey celestial Brahma gobierna la totalidad de los tres mundos. Los cinco caracteres de Miojo rengue kio pueden compararse con todas estas cosas; en ellos quedan contenidos todos los seres de los nueve estados, y los del estado de Budeidad. Y ya que todos los seres de los diez estados están contenidos en ellos, también lo están sus ambientes.
Ahora bien, con respecto al ideograma mio, el Sutra del loto afirma: «Este sutra abre el portal de los medios hábiles y muestra la forma de la verdadera realidad». El gran maestro Chang-an señala: «Mio significa revelar las profundidades del arca secreta». El gran maestro Miao-lo dice acerca de esto: «Revelar significa abrir». Por ende, el ideograma mio significa «abrir».
Aunque uno tenga un arca llena de tesoros, si no posee la llave no podrá abrirla, y si no consigue abrirla, tampoco podrá ver los tesoros que hay en su interior.
En la India, mio se dice [con la palabra sánscrita] sad, y en la China, miao. Mio significa «estar plenamente dotado», lo cual, a su vez, denota lo «perfecto y pleno». Cada palabra e ideograma del Sutra del loto contiene dentro de sí la totalidad de los 69.384 caracteres que forman el sutra. Para mostrarlo con un ejemplo, una gota del gran océano contiene en sí misma las aguas de todos los ríos que confluyen en él; una sola gema que concede los deseos, aun diminuta como una semilla de mostaza, es capaz de otorgar los mismos tesoros que uno obtendría con todas las gemas de los deseos que existen.
Mio significa «revivir»; es decir, volver a la vida. Por ejemplo, se dice que aunque el polluelo de una grulla amarilla muera, si su madre invoca el nombre de Tzu-an el ave muerta volverá a la vida. Asimismo, en el caso de los peces y moluscos que mueren envenenados cada vez que el ave ponzoñosa llamada chen se interna en el agua, se dice que si tocan un cuerno de rinoceronte todos reviven. De la misma manera, en los sutras anteriores al Sutra del loto se dice que las personas de los dos vehículos, los icchantikas y las mujeres han quemado las semillas para llegar a ser budas. Pero, si se aferran a este ideograma mio, harán revivir sus calcinadas semillas de Budeidad.
Disertación
En julio de 1949, la Soka Gakkai comenzó a publicar el Daibyakurengue, una revista mensual de estudio concebida para promover el conocimiento del budismo Nichiren y ser, desde este lugar, una fuerza impulsora del kosen-rufu. La primera tirada fue de mil ejemplares.
En aquella época yo tenía 21 años
Ávido de responder al ferviente llamado que, en ambos escritos, hacía mi mentor en aras del kosen-rufu, para el segundo número (agosto de 1949) yo también escribí un poema titulado «Esperanza en la juventud».
Joven, dedicaré mi vida
a la gran filosofía de Nichiren Daishonin,
que esclarece la esencia de la vida
y revela la ley primordial del universo.
El kosen-rufu es el camino a la paz duradera;
que los sabios lo conozcan
y lo recorran quienes aman a la humanidad.
¡Joven, abre los ojos!
Pues tú tienes la pasión y el poder
de avanzar como adalid de esta gran filosofía.
Expresaba en estos versos mi determinación de que nosotros, los jóvenes, desempeñáramos un papel central en la labor de la Soka Gakkai por propagar la gran filosofía del budismo Nichiren, que tiene el poder de iluminar a toda la humanidad.
El «loto blanco»: símbolo de ilimitado amor compasivo y de infinita sabiduría
El título de la publicación, Daibyakurengue, significa «Gran loto blanco»; el byaku rengue («loto blanco») que allí se menciona es el del Sutra del loto o Miojo rengue kio, símbolo de un buda genuino que corporifica la Ley Mística de la iluminación universal y que irradia sabiduría y amor compasivo en forma incesante.
La Ley Mística es una enseñanza que nos permite tomar conciencia de la verdad de que todos los seres vivos somos budas. En tal sentido, es el camino a la felicidad absoluta a través de las tres existencias del pasado, presente y futuro. Nada supera la Ley Mística.
El título Daibyakurengue —«gran loto blanco»— expresa el compromiso o juramento de enseñar la Ley Mística y de transmitir su verdad suprema a todas las personas.
En El daimoku del «Sutra del loto», el escrito que hoy estudiaremos, Nichiren Daishonin explica a una discípula la filosofía de la Ley Mística, que es una fuente de esperanza y de valentía, y le muestra el camino directo a la felicidad. Estudiemos juntos el gran poder benéfico de la Ley Mística
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Texto del Gosho
Nam miojo rengue kio
Pregunta: ¿Es posible, sin entender el significado del Sutra del loto, con solo entonar los cinco o siete ideogramas de Nam miojo rengue kio una vez por día, una vez por mes, o sólo una vez por año, o una vez en una década o en toda una existencia, evitar ser arrastrados a cometer malas acciones graves o triviales, salvarse de caer en los cuatro malos caminos y, en cambio, llegar con el tiempo al estado del que no se retrocede?
Respuesta: Sí, es posible.
Entonar Nam miojo rengue kio, aunque sea una vez, brinda incalculables beneficios
¿Qué clase de poder contienen los siete caracteres de Nam miojo rengue kio?
Al inicio de este escrito, el Daishonin pregunta: ¿Da algún beneficio entonar Nam miojo rengue kio aunque sea una sola vez sin entender lo que quiere decir? Y a continuación esclarece el enorme poder del daimoku del Sutra del loto: Nam miojo rengue kio
Desde el principio de la carta, el Daishonin afirma que el beneficio de entonar Nam miojo rengue kio es inmenso y supera todo cálculo. Afirma que «es posible, sin entender el significado del Sutra del loto, con solo entonar los cinco o siete ideogramas de Nam miojo rengue kio una vez por día, una vez por mes, o sólo una vez por año, o una vez en una década o en toda una existencia, evitar ser arrastrados a cometer malas acciones graves o triviales, salvarse de caer en los cuatro malos caminos y, en cambio, llegar con el tiempo al estado del que no se retrocede»
Como la Ley Mística tiene el poder enorme e ilimitado del Buda y el poder de la Ley, puede transformar cualquier clase de karma negativo.
Como escribe el Daishonin en otro texto: «Nam miojo rengue kio es como el rugido de un león». Cuando un león ruge, los demás animales son llamados a silencio. El poder del gran bien que se activa con la recitación del daimoku, aunque sea una vez, puede derrotar todas las expresiones del mal.
El Daishonin también escribe: «Solo los siete caracteres de Nam miojo rengue kio son la semilla para el logro de la Budeidad». Una sola semilla, al germinar, puede convertirse en una planta, dar muchas hojas y ramas, producir abundantes flores y cuantiosos frutos.
Nam miojo rengue kio, semilla de la Budeidad, contiene las causas de todas las innumerables prácticas que conducen a la iluminación, y los efectos de todos los beneficios y de la buena fortuna superlativa que derivan del logro de la iluminación. Por eso, si plantamos la semilla en el campo de nuestro corazón aunque solo sea una vez, tenemos la seguridad de poder lograr el mismo estado de vida que el Buda.
La mujer a quien fue dirigida esta carta debe de haberse sentido muy reconfortada por la declaración del Daishonin, sabiendo que el hecho de recitar Nam miojo rengue kio una sola vez nos permite entrar en el Camino que lleva a lograr la Budeidad. La lectura de estas palabras habrá fortalecido su fe y le habrá permitido entonar daimoku con mucha mayor alegría.
El «corazón» de todas las enseñanzas del budismo y el «ojo» de todos los budas.
Con respecto a la Ley Mística, beneficio significa erradicar el mal y producir el bien. El daimoku del Sutra del loto —Nam miojo rengue kio— neutraliza el mal fundamental inherente a la vida y habilita el bien primordial. Por eso, al hacer daimoku, podemos trascender en un instante todos los efectos negativos del karma y manifestar buena fortuna y beneficios incalculables.
Cuando las personas comunes, no iluminadas –plagadas de dudas, problemas y sufrimientos--, entonamos Nam miojo rengue kio aunque sea una sola vez, podemos transformar de manera positiva nuestras circunstancias de acuerdo con el principio de «convertir el veneno en remedio» y lograr un estado de vida colmado de esperanza, valor y paz espiritual. A las personas comunes, esta enseñanza nos resulta sorprendente e inescrutable. Se la llama Ley Mística justamente porque expresa los principios profundos y asombrosos con respecto a los cuales se esclareció el Buda.
«El ojo de todos los budas» quiere decir que todos los budas logran la iluminación a través de percibir esta Ley. En otras palabras, Nam miojo rengue kio es la Ley fundamental y única que permea eternamente todos los fenómenos.
La fe es la base de la recitación de Nam miojo rengue kio
¿Cuál es la clave para activar este inmenso beneficio innato en la vida? No es otro que la fe. Para recalcar su importancia, el Daishonin compara a los que tienen conocimiento pero no tienen fe con los que carecen de conocimientos pero poseen fe. Aquí, el conocimiento se refiere a comprender las enseñanzas y las doctrinas budistas.
Desde luego, lo mejor es tener fe y tener conocimientos. Sin embargo, la sabiduría del buda es «infinitamente profunda e inconmensurable» y a las personas comunes, con nuestras facultades limitadas, nos es imposible captar plenamente la Ley suprema que se encuentra en el corazón de las enseñanzas budistas.
Con respecto a entrar en el Camino del Buda, El capítulo «Parábolas y semejanzas» (3.o) del Sutra del loto dice que podemos ingresar solo a través de la fe. Incluso Shariputra, el discípulo de Shakyamuni que más se destacaba por su sabiduría, pudo captar la verdad mística del Sutra del loto no a través de su comprensión intelectual o de su saber, sino de la fe en la enseñanza amplia e ilimitada del Buda. La fe, por sí sola, es la clave para entrar en el Camino del Buda.
El Gojonzon se describe como un «cúmulo de beneficios». La clave para activar esos beneficios inextinguibles del Gojonzon es nuestra poderosa fe. En esta carta, el Daishonin escribe: «Así pues, la fe es el requisito básico para entrar en el Camino del Buda».
A través de nuestro esfuerzo persistente y sincero de entonar daimoku, podemos adquirir enormes beneficios. El daimoku también abre en nosotros un torrente caudaloso de valentía y fuerza vital.
Como afirma el Daishonin: «Considere el sufrimiento y la alegría como hechos de la vida, y siga entonando Nam miojo rengue kio, pase lo que pase». Cuando estén sufriendo, hagan daimoku; cuando estén estancados, hagan daimoku.
El señor Toda dio estas orientaciones:
La fuerte oración al Gojonzon es infalible. Sin embargo, hay tres condiciones: ¡daimoku, daimoku y más daimoku!
Si hacen daimoku con determinación absoluta, sin falta tendrán beneficios. Cuando entonan daimoku con seriedad, los más diversos pensamientos que vienen a la mente desaparecen y uno puede concentrarse en triunfar en sus esfuerzos en bien del kosen-rufu.
La fe en relación directa con Nichiren Daishonin solo existe en la SGI. La oración de cada miembro está enfocada en el juramento de lograr el kosen-rufu. Estamos entonando con fe vibrante el daimoku del Sutra del loto, el corazón de todas las enseñanzas del budismo y el ojo de todos los budas. En consecuencia, no cabe la menor duda de que podremos superar todas las modalidades del karma y lograr un estado de vida elevado, como si planeáramos libremente por el «cielo de la Luz Tranquila».
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Texto del Gosho
Pregunta: ¿Cuán grandes son los beneficios contenidos en los cinco ideogramas de Myoho-renge-kyo?
Respuesta: El gran océano contiene en su totalidad los numerosos ríos que desembocan en él; la gran tierra contiene todos los seres animados e inanimados; la gema que concede los deseos es capaz de prodigar un sinfín de tesoros, y el rey celestial Brahma gobierna la totalidad de los tres mundos. Los cinco caracteres de Myoho-renge-kyo pueden compararse con todas estas cosas; en ellos quedan contenidos todos los seres de los nueve estados, y los del estado de Budeidad. Y ya que todos los seres de los diez estados están contenidos en ellos, también lo están sus ambientes.
La Ley Mística contiene todos los beneficios del universo
A partir de este pasaje, el Daishonin explica la naturaleza infinita de los beneficios de la Ley Mística. Comienza planteándose: « ¿Cuán grandes son los beneficios contenidos en los cinco ideogramas de Miojo rengue kio?». Su respuesta es que ellos contienen a todos los seres de los nueve estados y del estado de Budeidad, así como al ambiente de dichos seres.
Así como «[e]l gran océano contiene en su totalidad los numerosos ríos que desembocan en él» —afirma—, la sola enseñanza de Nam miojo rengue kio contiene a todos los seres de los diez estados y a sus ambientes; dicho de otro modo, a todos los fenómenos.
Para decirlo de otra manera, la Ley Mística no existe separada de nosotros mismos. No hay que buscarla fuera de nuestra vida. Cada vida individual es una entidad de la Ley Mística, de manera original e inherente. La práctica del daimoku existe para que podamos liberar ese poder que ya tenemos en nuestro interior.
El Daishonin advierte de manera estricta, tras declarar que no estaríamos practicando la enseñanza budista correcta si buscáramos fuera de nosotros mismos la causa fundamental para el logro de la iluminación: «Si piensa que la Ley está fuera de usted, no está abrazando la Ley Mística, sino una enseñanza inferior».
El señor Toda solía decir: «La práctica del daimoku cultiva el estado de Budeidad», y también: «La fe consiste en tener, uno mismo, la más poderosa e invencible convicción. Cuando entonamos daimoku con el firme convencimiento de que las funciones universales nos protegerán sin falta porque somos manifestaciones de la Ley Mística, eso es, precisamente, lo que termina ocurriendo».
Texto del Gosho
Ahora bien, con respecto al ideograma mio, el Sutra del loto afirma: «Este sutra abre el portal de los medios hábiles y muestra la forma de la verdadera realidad». El gran maestro Chang - an señala: «Mio significa revelar las profundidades del arca secreta». El gran maestro Miao - lo dice acerca de esto: «Revelar significa abrir». Por ende, el ideograma mio significa «abrir».
Aunque uno tenga un arca llena de tesoros, si no posee la llave no podrá abrirla, y si no consigue abrirla, tampoco podrá ver los tesoros que hay en su interior.
Myo significa «abrir»
A continuación, en esta carta el Daishonin analiza el profundo significado del ideograma mio, y enseña de manera específica sus tres significados: abrir, estar plenamente dotado y revivir.
En primer lugar, el Daishonin afirma: « [E]l ideograma mio significa “abrir”». El Sutra del loto es la única escritura que abre el camino a la iluminación de todos los seres, propósito supremo del budismo.
La Ley Mística tiene el poder de abrir el «arca» de tesoros que existe en la vida de todos los seres vivos; es decir, el estado de Budeidad latente en la realidad de los nueve estados, y de revitalizar con vigor la existencia humana.
El verdadero valor del budismo solo se demuestra en la medida en que podemos realmente transformar nuestra vida y manifestar en el transcurso de nuestra realidad cotidiana el mismo estado de vida de suprema nobleza que exhibió el Buda.
El budismo Nichiren es una enseñanza que nos permite transformar nuestras circunstancias en la medida en que cambiamos como personas. Hacemos surgir nuestra naturaleza de Buda inherente y nos dedicamos al proceso de la revolución humana. Día tras día practicamos vigorosamente el daimoku, adquirimos experiencias sobre la fuerza de nuestra práctica budista, extendemos a otros la alegría de la fe y, de esa manera, ampliamos la red de personas dedicadas a la causa del bien.
Nuestro movimiento ciudadano de personas budistas esclarecidas sentará las bases para crear una cultura de respeto a la vida y a la dignidad humana, así como también un enérgico desarrollo de la sociedad y de la paz mundial.
Texto del Gosho
En la India, mio [«místico» o «prodigioso»] se dice [con la palabra sánscrita] sad, y en la China, [con la palabra] miao. Mio significa «estar plenamente dotado», lo cual, a su vez, denota lo «perfecto y pleno». Cada palabra e ideograma del Sutra del loto contiene dentro de sí la totalidad de los 69.384 caracteres que forman el sutra. Para mostrarlo con un ejemplo, una gota del gran océano contiene en sí misma las aguas de todos los ríos que confluyen en él; una sola gema que concede los deseos, aun diminuta como una semilla de mostaza, es capaz de otorgar los mismos tesoros que uno obtendría con todas las gemas de los deseos que existen.
Mio significa «plenamente dotado»
A continuación, el Daishonin escribe: «Mio significa “estar plenamente dotado”, lo cual, a su vez, denota lo «perfecto y pleno». Como expuse antes, el daimoku del Sutra del loto es la Ley fundamental que abarca todos los beneficios.
Con respecto a estar «plenamente dotado», el Daishonin se vale de dos analogías: «[U]na gota del gran océano contiene en sí misma las aguas de todos los ríos que confluyen en él» y «[L]as plantas y los árboles se marchitan y pierden sus hojas en otoño e invierno, pero cuando el sol los entibia en primavera y verano, asoman brotes y hojas nuevas en sus ramas, y luego, flores y frutos». De la misma manera, el solo ideograma myo contiene dentro de sí todas las enseñanzas y todos los beneficios, que se manifiestan en respuesta a las causas y condiciones.
Todos los beneficios del Sutra del loto, sin excepción, están incluidos de manera inherente en el ideograma mio. Miojo (Ley Prodigiosa o Ley Mística) es la traducción al chino del término sánscrito saddharma propuesta por el traductor y sabio budista Kumarajiva (344-413). Se dice que sad de saddharma denota lo perfecto y completo.
El vibrátil sonido de Nam miojo rengue kio tiene el poder de activar la noble naturaleza de Buda inherente a la vida del universo. Por eso, en el momento en que entonamos Nam miojo rengue kio, los budas y deidades celestiales comienzan a extendernos su protección, y todas las cosas y personas se convierten en aliados.
Texto del Gosho
Mio significa «revivir»; es decir, volver a la vida. Por ejemplo, se dice que aunque el polluelo de una grulla amarilla muera, si su madre invoca el nombre de Tzu-an el ave muerta volverá a la vida. Asimismo, en el caso de los peces y moluscos que mueren envenenados cada vez que el ave ponzoñosa llamada chen se interna en el agua, se dice que si tocan un cuerno de rinoceronte todos reviven. De la misma manera, en los sutras anteriores al Sutra del loto se dice que las personas de los dos vehículos, los icchantikas y las mujeres han quemado las semillas para llegar a ser budas. Pero, si se aferran a este ideograma mio, harán revivir sus calcinadas semillas de Budeidad.
Mio significa «revivir»
Finalmente, el Daishonin escribe: «Mio significa “revivir”; es decir, volver a la vida». Esto expresa el beneficio incalculable e ilimitado de la Ley Mística, que tiene el poder de revivir a todos los seres y de permitirles lograr la Budeidad. Indica que los que eran incapaces de lograr la Budeidad en los sutras anteriores al del Loto —las malas personas, las mujeres y las personas de los dos vehículos — ahora sí podían hacerlo.
El Daishonin esclarece el enorme poder de mio mediante los ejemplos de las plantas que reviven en primavera y verano, o de un médico excelente que, con una sustancia venenosa, elabora un agente terapéutico. Revivir significa volver a la vida.
Otra forma de examinarlo es que, aunque todos hayan renunciado a alguien o lo hayan abandonado, el Sutra del loto no excluye a nadie. Todas las personas, sin excepción, pueden revelar el estado de la Budeidad mediante la fe en la Ley Mística. Esta enseñanza es un brillante rayo de esperanza que ilumina radicalmente el destino del género humano. El poder revitalizador de la Ley Mística es la usina que nos permite dejar atrás el sufrimiento más hondo y empezar a experimentar la dicha de la creación de valor.
Los que hacen daimoku jamás se estancan
El poder del Gojonzon solo puede describirse con la palabra mio o insondable. La fe en el Gojonzon es un medio infalible que nos permite adquirir enormes beneficios. La fe en el Gojonzon nos asegura la victoria absoluta. No hay forma de que sus oraciones queden sin respuesta. ¡Aprovechen cada momento libre para hacer daimoku!
La revolución humana que está llevando a cabo cada miembro de la SGI significa convertir los abismos de la desesperación en una vida de rítmica y firme vitalidad. La SGI ha mostrado al mundo entero la verdad de que «mio significa “revivir”; es decir, volver a la vida». Nadie puede detener esta marea surgente de personas jubilosas y dinámicas... En todo el mundo, nuestros miembros representan una saga emocionante de cambio positivo, de renovación y de felicidad.
Los «tres significados de myo» nos aseguran, en definitiva, que así como el sol disipa la oscuridad, la vida de los que entonan Nam miojo rengue kio asiduamente jamás se estancará. La recitación del daimoku es el cimiento del budismo Nichiren. Cuando entonamos un daimoku vigoroso, un sol deslumbrante ilumina nuestra vida. Surge la energía, brota el amor compasivo, explota la alegría y brilla la sabiduría. Todos los budas y las funciones protectoras del universo se ponen en acción de un salto. ¡Qué gusto da vivir...! Nada es más poderoso que el daimoku.
«La enseñanza que nos sitúa en las coordenadas de la victoria»
En otro escrito, el Daishonin observa: «De todos los que pronuncian las palabras Nam miojo rengue kio, así sea una sola vez, ni uno dejará de convertirse en un buda». Cuando tengan un problema, siéntense ante el Gojonzon y hagan daimoku; avancen siempre basados en el daimoku. Quienes tienen esta postura siempre triunfan.
Los que entonan Nam miojo rengue kio no deben temer a nada. Hoy, una vez más, entonemos un daimoku resonante, hagamos surgir una poderosa fuerza vital y entablemos con los demás un diálogo valiente que lleve mensajes de felicidad.
Todos están esperando... todos buscan una gran filosofía que les permita liberar su potencial humano y revivir el poder fundamental de la felicidad. Ha llegado la hora de que los Bodisatvas de la Tierra de la SGI salgan al escenario mundial con mucha mayor decisión y generen a su alrededor una exuberante floración de triunfos y de felicidad, como si se abriera un sinfín de lotos blancos.
Este Gosho nos recuerda:
- La ley Mística es una fuente de esperanza y de valentía y muestra el camino directo a la felicidad.
- La Ley Mística tiene el poder enorme e ilimitado del buda y el poder de la ley, puede transformar cualquier clase de Karma.
- Fortalecer la fe y permitirnos entonar daimoku con mucha mayor alegría.
- Beneficio significa erradicar el mal y producir el bien.
- La fe es el requisito básico para entrar en el Camino del Buda.